jueves, 6 de agosto de 2015

Argumosa



La belleza son los muertos
revueltos entre las mesas enfermos del apéndice
se han instalado en el cemento con los pelos de punta
con la frecuencia de los cuartos vacíos
la abundancia devoran sus brazos
ríen hechos cadáveres
constelación de rostros debajo de sombras
en el pedernal de la lluvia se hacen escafandristas de los pulmones
se transfieren las costuras
lánguidos torsos de sus caducas heces
hacinados a la sed de las ginebras
donde una ballena atónita ha poblado los relámpagos
y el único camino son monedas escritas de algarabía
se perfilan las mañanas picoteando témpanos calle abajo
una enfermedad lírica en morenas de cráteres fluviales
la cadencia de los gestos debaten en carretillas
a pie de árboles disecados por orines
meditación fósil boca fósil
el silencio se reduce a extinguir el cráneo y a llorar por un León
las máscaras como pozos de ausencias
cables pelados que caminan
a todos los músicos les cuesta el equilibrio.








Gio.

2 comentarios:

Iosune De Goñi dijo...

Me ha recordado a Rostros en el agua de Janet Frame.

Poema bellísimo, como los muertos.

Giovanni-Collazos dijo...

Hola Iosune

No he leído a Janet Frame, la buscaré.
Gracias por leer, siempre creo que nadie lo hace.
Este poema me llena de dudas, no he quedado conforme. Pienso que debe mejorar (como casi todos).
Gracias de nuevo.
Abrazo.