domingo, 10 de octubre de 2010

Coordenadas de perros

.
Tengo el estómago vacío de ideas
y el animal hambriento de existencia

los ojos descarnados y sedientos, beben sus lágrimas
en ésta tempestad que aniquila las coordenadas de los perros.

Tengo la cabeza de barro, en mi pérdida de huesos
que ataca la oscuridad y se blinda ante el olvido
con el hormigón lleno de cuchillos
que aprietan mi cuerpo.

Tengo el pecho lleno de corazón, con hedor de muerte

y me hace tan obsceno
que sólo me salva la música carnal
de mi sordera.





Gio.

8 comentarios:

estrella dijo...

BUENAS NOCHES GÍO!!!!
ME ALEGRO DE ENCONTRARTE!!!!

Tu instinto de supervivencia es más fuerte,puede que tu corazón esté blindado,pero sigue ahí,escúchalo!
Es la mejor música

Gracias por volver,te echaba de menos
Un fuerte abrazo Giovanni

VICTOR VERGARA dijo...

Poesía potente y profunda, Gio.

Me alegra verte de nuevo. Escribir es siempre bueno, limpia por dentro como el agua de lluvia durante la noche. Amanecen los cielos transparentes.

Un abrazo.

mis largos pies dijo...

Yo sabía que no te irías, por lo del animal habriento de existencia, por eso no me despedí de ti.

No sé lo que son las coordenadas de perros, pero me gustaría saberlo. Y sí sé lo que es tener el pecho lleno de corazón, pero nunca lo había visto tan bien dicho.

Seguimos entonces. Besos, Gio.

Mayte Sánchez Sempere dijo...

Impresionante, Gio. Es como una pedrada en la propia frente.

Beso grandr.

Caos dijo...

Me alegro que sigas. Y que sigas tan bien.

saludos

TrasTera dijo...

No sé lo que pasa ultimamente con mis comentarios, pero el otro día venía a decirte que me había encantado tu poema, y que aún con el corazón vacío de ideas habías conformado unos buenos versos. Encontrar la melodía adecuada sólo es cuestión de tiempo para aquel que busca.
Ahh y gracias por acercarte a mi Quito laberíntico.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

me encanta.

un saludo,
g.

Haffner dijo...

Muy bueno.

Un abrazo.