jueves, 13 de agosto de 2015

Negro



Allá en la tristeza todos danzan
todos se multiplican nebulosos y prosaicos
saltan     saltan    saltan
hasta la elocuencia del sol sobre los ojos
bailarines lunarios de pieles noches
cantos de pies sabanas
lloran como tierra en los quinientos frutos
hombres simientes de la nieve con kilómetros de mantas en la espalda
saltan     saltan
hasta la intuición de los naranjos y las vitrinas
llevan muertos en los hombros
así cruzan la lágrima el hierro la quemadura
una bala blanca es la cerradura que no llega al escalofrío
buscan un plato compuesto de números
la substancia exaltada en sus cabelleras
sueñan el trabajo los espejos un iris donde enraizarse
brujulean campánulas en los lavabos
abruptas monedas llegan deshojando la cadencia
corren     corren
les persiguen
los caimanes azules huelen la sangre
quieren exterminar a los danzantes que pronuncian: soy humano.








Gio.

1 comentario:

Verónica Durán González (dientedecoral) dijo...

Tu negro cromático Gio. Qué difícil comentar sin destrozo.


Un abrazo de álamos parpadeando, parpadeando.


Vero.