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Llevar la vida a cuestas dentro de un profiláctico
hace que mi vidriado color
cave feroz en la izquierda de los ceros
sin la continua muerte calmando el hambre
ocultando la profundidad para que nada pueda hundirse
pintar un cuadro donde no salga el alma
con los tiernos difuntos
ensanchados de invierno
callar a voz en cuello las horas de la deriva,
ser enjambre sin eco
sobre un bosque que bosteza sombras.
Gio.
6 comentarios:
otra vez el calambre en el seso, eh. Otra vez la palabra sale sola. Fuerza, Gío. Ahí lo tienes: dale
me duelen tus versos que se clavan, me alegro de que vuelvan a ser.
besicoss
con los tiernos difuntos
ensanchados de invierno!!!!!
ufffff!
Callar a voz en cuello las horas de la deriva. Tremendo!!! Hay momentos en que los poemas se hacen solos. Me alegro.
Tu poema ha sido un latigazo al alma. Un dolor que llega y se instala, Gio.
Coincido con Eloy, ese verso "callar a voz en cuello las horas de la deriva" es tremendo!!!
Un abrazo.
Leo
tu poesia siempre es maravillosa ! te sobra talento, pero solo quiero desearte mas poesia para el 2012, besos
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